POR QUÉ SER ESCRITOR FANTASMA

Bien sabido es que, ser escritor fantasma, no implica el máximo de los reconocimientos, de ahí que también se les conozca como “negros literarios”.

Dedicarse profesionalmente a ser escritor por encargo tiene sus cosas buenas y sus cosas malas, aunque, si eres un enamorado de la escritura, solo pueden extraerse puntos positivos.

Y es que hoy en día ser un escritor famoso y vivir de la palabra es harto complejo. El mundo editorial se ha vuelto hermético y cuesta conseguir publicaciones si eres un autor desconocido. Quien ama de verdad la palabra y pretende medrar y aprender, encuentra en la labor de escritor fantasma un consuelo, un trabajo y una, por qué no decirlo, buena obra social. Porque la gente necesita los libros, los discursos, los cuentos, las dedicatorias. Porque ayudar a otras personas a recopilar la esencia de sus vidas, sus amores o inquietudes es un regalo, no solo para el cliente, sino para quien tiene el privilegio de aprender a base de escuchar otras historias y convertirlas en libros que dan ganas leer.

Puede que tu nombre no vaya a salir a la luz si te contacta alguien que ha estado buscando contratar biografías por encargo, pero la felicidad que reportas a la otra persona al ver formada y plasmada su idea es la mejor forma de pago. Además, solo a base de leer y escribir se crean los grandes escritores, con lo que puede ser un estupendo punto de partida para mejorar la redacción, la creatividad y la capacidad de adaptarse a diferentes estilos. Leer te da más, escribir crea vida.